FICHA TÉCNICA
Recorrido: Alcalá de Xivert-Castillo de Xivert-Alcalá de Xivert
Distancia: 8,46 kilómetros
Circular: SI
Dificultad: Fácil
Tiempo total: 4 horas
Tiempo en movimiento: 3 horas
Cota máxima: 382 metros
Cota mínima: 142 metros
Desnivel máximo: 276 metros
Recomendable con niños: SI
Recomendable para inexpertos: SI
Mejor época: Otoño, invierno y primavera. (Evitar en verano)
Es un desastre el turismo que devasta esta zona costera pero para amantes verdaderos de esta tierra siempre quedan rincones donde refugiarse. Describe muy bien la clase de turismo salvaje cuando este escondite es un emplazamiento histórico-cultural.
Castillo de Xivert
El Castillo de Xivert es una fortificación islámica de los siglos X y XI. Trás la conquista durante el siglo XIII por la Orden del Temple, los famosos templarios, fue ampliamente reformada. En los últimos años parece que se está haciendo un esfuerzo desde la administración para reformarlo de nuevo. Así como a un pueblo Ibero que se encuentra en la falda de los muros del castillo. Los elementos arquitectónicos que se observan en la actualidad ocupan una extensión de 8 km2 en la cima y ladera de la montaña de Xivert. Esta montaña es una de las estribaciones del macizo de la Sierra de Irta. Hoy por hoy la Sierra de Irta, situada en la costa de la comarca del Baix Maestrat, es un Parque Natural desprotegido de las invasiones urbanísticas, por parte sobre todo de las poblaciones costeras de Peñiscola y Alcossebre.
La ruta senderista
La ruta comienza en el restaurante Manel, junto a la carretera N-340. Hay que entrar en dirección Tarragona, así que si vais dirección Castellón tendréis que dar la vuelta en un desvío a Alcalá que hay más adelante. Aquí encontrareis un gran espacio para aparcar y las primeras señalizaciones destinadas a coches. Es mejor que no probéis el café del restaurante 🙁
Siguiendo la carretera con indicaciones encontraréis las señales de sendero PR-CV 432, pudiendo apreciar en el horizonte el Castillo de Xivert abrigado por la Sierra de Irta. Pasaremos la Autopista por un túnel hormigonado, estructura muy característica de la zona, y empezaremos un ligero ascenso entre cultivos de naranjos por el camí de l’Assegador sin hacer caso a las señalizaciones preparadas para vehículos. Recordad seguid los hitos del sendero, aunque todos los caminos llevan a la Creu del Francés.
La Creu del Francés, con la inscripción a piedra «En este sitio fue muerto por los franceses Antonio Cherta en 17 de agosto del año 1810. En paz descanse», nos indica el nuevo sendero que debemos coger escondido en el pinar. Aquí aumenta el desnivel junto la belleza de la flora, entre la que encontramos setas en mal estado como Boletus, Suillus y la extraña Jaula Roja, una pestilente belleza de color vivo. La verdad que las setas fueron algo desconcertante si contamos que la ruta la hicimos en invierno. También nos sorprendió encontrar estas variedades en un zona tan seca.
Una vez cruzado el pinar continuamos por un cortafuegos sin perder de vista el norte, un castillo que crece tal como nos acercamos. Al este nos acompañara una estupenda panorámica de las estribaciones de Sierra de Irta con el mar de fondo. A partir de aquí el camino ya es liviano, enseguida llegamos al pueblo Ibero, y ya en el Castillo aprovechamos para darnos un homenaje con un buen almuerzo.
El Castillo, en plena restauración, es una maravilla con las torres gemelas en perfecto estado. Estas torres son un símbolo de la construcción templaria. La orden del temple, tras su tradicional expolio, lo primero que construían en todas sus fortificaciones eran torres como las de Xivert.
El descenso por otro sendero
Obligándonos a dejar de admirar la estupenda panorámica de la llanura castellonense, salimos del castillo y continuamos por la pista para enseguida ver el camino de bajada por la ladera norte de la montaña de Xivert. El descenso es ligero por medio de un pinar más denso que el anterior. El pinar acaba enseguida por la pequeña cota que ocupa y nos adentramos en nuevos cultivos de naranjos. Continuaremos por el sendero hasta encontrar la autopista. Proseguimos por un camino paralelo a la autopista hasta el mismo túnel hormigonado que deberemos cruzar de nuevo.
Ya en el camino de vuelta, echas la vista atrás y la panorámica de la Sierra de Irta con el Castillo de Xivert en su cumbre, la que visualizabas al llegar, te dice que algo en ti ha cambiado, que esa caminata te ha hecho perder calorías. Así que lo mejor es ir al pueblo de Alcalá de Xivert y pegarse una merendola 😉
EXTRA
Música templaria para sanar el alma.